¿HASTA CUANDO LA CALLADA POR RESPUESTA? (Felix Sautie Mederos)

276 a.- ¿Hasta cuándo, la callada por respuesta? ¿Será en realidad que muchos opinantes estamos tan equivocados?... Félix Sautié Mederos 09 Jul, 2021 19 Veces visto 0 Comentarios MI COMENTARIO DEL DÍA. En unos pocos días el 28 de julio, cumplo 83 años, soy un LEO; y no puedo quedarme tranquilo en mi cuarta edad privilegiada disfrutando solo de mi vejez con conciencia presente; y nada más, porque he alcanzado el tiempo de vida que muchos otros con mayores mérito que yo no pudieron logarlo. Estoy consciente también, que como hombre revolucionario siempre público he acumulado defensores y detractores. Eso es normal e incluso, hasta positivo porque forma parte de la democracia real y verdadera. En mi criterio muy personal, lo que moralmente me corresponde en consecuencia, es no tirar la toalla al medio del ring que es la vida; y descansar para siempre, mi profesión de periodista comprometido con la Revolución de Fidel y con mi cristianismo revolucionario de muchos años dese 1957 a la época, especialmente en un país en Revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes. Soy un defensor nato del relevo generacional de continuidad presente, que estamos viviendo, porque no puede ser de otra forma; ya que las generaciones que hemos hecho las Revolución a partir de la Generación histórica del Centenario, no podemos quedarnos en actividad de por vida; porque la existencia es efímera y objetivamente tiene un final terrenal que nadie ha podido obviar. He publicado decenas de artículos apoyando a Miguel Díaz Canel, como la nueva cabeza visible de una Revolución que comenzó el 10 de octubre de 1868 con Carlos Manuel de Céspedes; y se revivió para siempre con Fidel en su Asalto del Moncada y su triunfo del 1 de enero de 1959. Un fracaso de las nuevas generaciones en el poder sería un fracaso definitivo de la Revolución Triunfante de Fidel; y es por ello que tenemos que defender hasta con las uñas a los jóvenes que han asumido los timones de mando de la sociedad. Defenderlos, además, es poner en práctica las críticas objetivas y necesarias, porque solo se podrá triunfar si se pone en práctica el legado de Fidel en su integralidad comenzando por cambiar todo lo que deba ser cambiado. En mi opinión muy personal, ante todo, dejando atrás para siempre al pensamiento conservador y la acción inmovilista burocrática y en ocasiones, corrupta. Nadie me lo podrá negar; y es por eso que no me detengo en mi derecho a opinar siempre con mis respetos por la opinión diferente y siempre también sin querer ofender a nadie en particular. Por tanto, no puedo quedar en silencio ante un inmovilismo conservador que como se dice en buen cubano “nos está comiendo por una pata”. No podemos continuar solo con explicaciones y disertaciones objetivas, efectivas y eficaces. Somos muchos los que estamos alertando de la necesidad de las acciones concretas. Bien se conoce lo que hay que hacer, incluso aprobado está en los últimos congresos del Partido; porque el pueblo sufre con la burocracia y las corrupciones que se hacen evidentes en la base; y que incluso nuestro Presidente y Primer Secretario del Partido no se cansa de condenarlas. No obstante, algo más es imprescindible y urgente, porque como expreso en mi anterior comentario las campanas están repicando a arebato; hay que barrer con las burocracias conservadoras y con las ineficiencias, e ineficacias. Sobre esto escribió Joaquín Benavides, en un breve pero profundo artículo que apoyé decisivamente en mi último comentario y que se ha publicado en el blog Segunda Cita de Silvio Rodríguez que comenta con claridad meridiana Juan M Ferrán Oliva en una entrada de ese mismo blog titulada jueves, 8 de julio de 2021 “A defenestrar*” (https://segundacita.blogspot.com) que recomiendo leer detenidamente y que apoyo totalmente. En consecuencia; Y, yo me pregunto: ¿Hasta cuándo la callada por respuesta? ¿Será en realidad que muchos opinantes estamos tan equivocados?... Así lo pienso y así lo expreso en mi derecho a opinar con mis respetos para el pensamiento diferente y sin querer ofender a nadie en particular.