LUCHA DE RAZAS: UN JUEGO SUCIO(Max Lesnik Menendez)

DESTACADOS, RÉPLICA Lucha de razas: Un juego sucio Max Lesnik Por: Max Lesnik junio 05, 2022 FacebookTwitterCompartir General Charles Magoon La historia sirve para aprender de ella y así evitar repetir los graves errores del pasado. Sabio consejo que, de seguirlo los gobernantes, ahorrarían a la humanidad tantas guerras y desgracias. Viene al caso esta referencia a un acontecimiento trágico en la historia de Cuba como fue la insurrección de los “Independiente de Color” – todos de la raza negra- en el año 1912, que culminó con el aplastamiento sangriento y la muerte de más de tres mil de los sublevados. Nada de ello hubiera ocurrido entonces, si el Gobernador norteamericano de la isla, la frente de la segunda Intervención militar de Estados Unidos en Cuba, General Charles Magoon no hubiera reconocido como Partido político legal, antes de abandonar su cargo, al movimiento de los “Independientes de Color”. Una idea maquiavélica de su asesor político, el tristemente célebre Enoch Crowder cuya intención no era otra que sembrar la semilla de la “Guerra de Razas” y así preparar el terreno para una nueva Intervención militar norteamericana, en caso de que el nuevo presidente de la Republica el General José Miguel Gómez, electo en lose comicios generales del año 1909, no se plegara a los designios del poderoso vecino del norte. Es obvio que se trataba de una “Bomba de Tiempo” sembrada por el Interventor Magoon con fines perversos, puesto que darle legalidad an un Partido político integrado por personas de la raza negra, no era lógico que proviniera de unos funcionarios de una país tan racista como eran los Estados Unidos de aquellos tiempos. A todas estas hay que consignar que el presidente del Partido “Independientes de Color”Evaristo Estenoz, en plana insurrección, envió una carta al gobierno de Estados Unidos a través de Cónsul norteamericano en Santiago de Cuba solicitando una nueva intervención militar en Cuba con el fin de buscar la protección de las tropas estadounidenses. Esta diabólica agresión a La Paz social en Cuba en fecha tan lejana como la primera década del pasado Siglo XX, la vemos renacer ahora con la aparición en el escenario cubano de un movimiento de oposición al gobierno de la isla que tiene como singular característica de que sus integrantes son en su inmensa mayoría de la raza negra. La extrema derecha cubana de Miami, con la aprobación y concurso probable de algunas agencias del gobierno norteamericano, así como los medios de prensa a su servicio, están promoviendo un conflicto racial entre negros y blancos de la isla, con la deliberada intención de crear una deseable violencia callejera con la finalidad de hacer de Cuba un país ingobernable según sus planes subversivos. Es la misma historia de siempre. Crear un escenario propicio para una intervención militar del poderoso vecino del norte bajo el pretexto de que tal acción invasora extranjera, se haría en nombre de los socorridos “Derechos Humanos”, con el fin de”pacificar” la isla envuelta en una situación de caos y violencia. No por casualidad el tal “Movimento San Isidro” esta integrado por personas de la raza negra, como también son de esa misma raza los integrantes del grupo musical “Gente de Zona”, así como como lo es el ciudadano español, de origen cubano “Yotuel” Romero, un vulgar Reguetonero que al parecer le han asignado el papel de “Lider” de esta nueva “Oposición” contrarrevolucionaria, que a todas luces esta pagada y dirigida desde el extranjero y cuenta con el apoyo de ciertas Agencias del gobierno norteamericano dedicadas a la subversión interna de Cuba. La finalidad es promover en la isla lo que ellos llaman una “Política de Cambio de Régimen”. En otras palabras: Derrocar al gobierno cubano, algo que se viene intentado desde hace más sesenta años sin que haya dado resultado. Promover en Cuba una lucha de razas es mas que un crimen, una perfecta estupidez a la cual solo se prestan los tontos y los traidores dispuestos a venderse como Judas a un poder extranjero. Según Carlos Marx “La historia ocurre dos veces: la primera como un gran tragedia y las segunda como una miserable farsa.” Estamos ante una farsa miserable. Relacionado