AQUEL DEFENSOR DE LOS ESTUDIANTES DE MEDICINA(Progreso Semanal)

CubaEEUUFloridaSurMundoColumnas#BrevesWeekly CUBA Aquel defensor de los estudiantes de Medicina Por Aurelio Pedroso En Nov 24, 2021 ShareFacebookTwitterEmailGoogle+ Válido, muy interesante y controvertido el testimonio suscrito por el comandante del Ejército Libertador, Luis Rodolfo Miranda en su libro Reminiscencias Cubanas; De la guerra y la Paz, publicado en La Habana, en 1941. Miranda se alistó muy joven como abanderado en la tropa del general Calixto García en la contienda independentista de 1895. Con sólo 17 años de edad participó del último cumpleaños celebrado en Nueva York a nuestro José Martí. El venidero enero pienso comentar acontecimiento tan singular y poco conocido. Hoy, en vísperas de un aniversario más del fusilamiento de los estudiantes de Medicina un 27 de noviembre de 1871, uno de los crímenes más horrendos cometidos en la historia independentista, descubro un singular relato del comandante “Mirandita”. Sitiada Santiago de Cuba por tropas cubanas y norteamericanas a principios de julio de 1898, fue ordenado el alto al fuego para que la población pudiese abandonar la ciudad. “Así pudimos presenciar, desde nuestras posiciones estratégicas, la marcha lenta, en largas filas, de unas treinta mil personas. Entre la multitud se destacaba la bandera francesa, que llevaba desplegada el cónsul de dicha nación en Santiago, M. Edmond Hippeau, al frente de sus ciudadanos. Confundido con la muchedumbre, vimos ya en pleno territorio de Cuba libre, a un hombre alto, enjuto, pálido, de aspecto enfermizo, pero aun conservando la airosa figura propia suya, de militar pundonoroso y humano: era el capitán retirado del ejército español Federico R, Capdevila y Miñano, el célebre defensor de los estudiantes mártires de la Universidad de la Habana, en noviembre de 1871”. Miranda se lo informa a Calixto García y este le ordena que, en su nombre, fuera en busca de Capdevila y le atendiera en lo que fuese necesario, acción que le permitió comprobar cómo el capitán español “apreciaba la hidalguía gentil del general García”. Capdevila era visitado frecuentemente y se le brindó a él y familia diversos servicios y atenciones posibles en momentos tan delicados y convulsos. Y refiere el autor: “Es el recuerdo que conservo de Capdevila, el militar español honrado y valiente que, en circunstancias trágicas, supo enfrentar las turbas y a las crueles violencias de aquellos milicianos o “voluntarios” integristas que arrancaron sus preciosas vidas a los inocentes estudiantes del 27 de noviembre de 1871, en plena Habana…! ¿Y qué menos podían hacer los libertadores de la patria cubana que rendirle al glorioso militar español, al abrigo de Cuba Libre, aquellos honores que tan justamente merecía? Progreso Semanal/ Weekly autoriza la reproducción total o parcial de los artículos de nuestros periodistas siempre y cuando se identifique la fuente original y el autor.